martes, 11 de marzo de 2014

Reseña: Jane Eyre - Charlotte Brontë

Título: Jane Eyre
Título original: Jane Eyre
Autor/a: Charlotte Brontë
Editorial: Alianza Editorial
Pág. aprox.: 656
Precio aprox.: 10.90
Sinopsis
Dueña de un singular temperamento desde su complicada infancia de huérfana, primero a cargo de una tía poco cariñosa y después en la escuela Lowood, Jane Eyre logra el puesto de institutriz en Thornfield Hall para educar a la hija de su atrabiliario y peculiar dueño, el señor Rochester. Poco a poco, el amor irá tejiendo su red entre ellos, pero la casa y la vida de Rochester guardan un estremecedor y terrible misterio.

Opinión
Jane Eyre perdió a sus padres cuando era una niña. Sus tíos, los Reed, la acogieron en su propia casa, pero en cuanto su tío murió, la señora Reed, no dudó en mandarla a una escuela lejos de su familia en cuanto pudo. Los años que Jane pasó en Lowood, tanto como alumna como de profesora, le llevarían a ejercer el cargo de institutriz en la mansión de Thornfield Hall, donde educaría a la pequeña Adèle, protegida del Sr. Rochester. Poco a poco empieza a surgir el amor entre Jane y el Sr. Rochester, pero lo que ella no sabe es que en Thornfield Hall se esconde un secreto que amenazará la felicidad de Jane y que la hará tomar difíciles decisiones que deberá afrontar con la fuerza de su voluntad.

¿Cómo abordar una novela como Jane Eyre? Charlotte Brontë nos ha regalado una protagonista y una historia sin igual, original y única. La novela está dividida en tres volúmenes y a pesar de su extensión, (alrededor de 650 páginas), el ritmo no decae en ningún momento y el desarrollo de los acontecimientos hará que no te despegues de sus páginas. Jane Eyre nos narra la vida de la joven del mismo nombre, desde su dura infancia en la casa de su tía Reed, sus días en la escuela Lowood, hasta su llegada a Thornfield Hall, el amor que alberga por el Sr. Rochester, uno de los personajes masculinos más carismáticos con los que me he encontrado nunca, y el posterior descubrimiento de un secreto que la pondrá en la dura decisión de elegir entre sus principios y su amor propio o lo que siente por su amado.

Jane Eyre es de esas protagonistas que marcan un antes y un después, porque a pesar de ser un personaje que data de 1847, los ideales que representa están muy avanzados para la época, unos ideales que pertenecen a una mujer, Charlotte Brontë, que no duda en imprimir sus pensamientos en cada una de las palabras que se narran. Jane es fuerte, decidida, cultivada, con ansias de aprender, de ver mundo y ampliar sus horizontes, pero también quiere ser amada con la verdadera fuerza del amor y no según la conveniencia social, el apellido o la fortuna. Es una protagonista por la que sientes simpatía desde que la conoces, pero también sufriremos con ella, reiremos y reflexionaremos con sus palabras.

Edward Rochester es el dueño de Thornfield Hall y el hombre que se enamora de Jane. No es un hombre guapo, pero sus atractivos personales hacen que ella se rinda a él y que se desarrolle una relación apasionada, conversaciones inteligentes y directas entre ellos que os sacarán más de una sonrisa. El Sr. Rochester es directo, posee mucha fuerza y la pasión lo domina, pero lo que acaba colmando su vida de felicidad es el amor que sentirá por Jane. La diferencia notable de edad entre los personajes, (ella tiene diecinueve y él casi cuarenta), es otro de los temas que toca la autora y que resuelve con excelencia, mostrándonos que el amor no entiende de edades, sino de afinidades.

"[...]Porque cuando digo que soy de su condición, 
no quiero decir que tengo su fuerza para influir ni su hechizo para atraer, 
sólo quiero decir que tenemos ciertos gustos y sentimientos en común. 
Debo repetirme constantemente, por lo tanto, que estamos separados para siempre y, 
sin embargo, mientras siga respirando y pensando, debo amarlo".

La historia está contada en primera persona, algo no muy usual en las novelas clásicas (yo por lo menos no me he encontrado muchas así), e incluso incluye apelaciones directas al lector, lo que hará que te sientas en una posición más cercana a los personajes y a la trama. Por otro lado, ésta no gira en torno a lo que sienten los personajes, sino también en desvelar lo que se esconde en la mansión de Thornfield y las consecuencias que se suceden tras su descubrimiento, lo que acaba desembocando en un final que me ha emocionado muchísimo y me ha encantado.

Jane Eyre narra una historia interesante, original y única, con unos personajes que cobran vida; Jane y el Sr. Rochester te provocarán un sinfín de emociones. Con un estilo narrativo singular y muy especial, Charlotte Brontë no duda a la hora de reflejar en su novela sus pensamientos e ideales sobre la situación de la mujer de la época y el papel que tenía la religión y todo con el mayor esmero posible, consiguiendo dotar Jane Eyre de personalidad y otorgándole la etiqueta de título imprescindible. 

Autor/a
Charlotte nació en Thornton, Yorkshire (Gran Bretaña), hija de Patrick Brontë, clérigo de origen irlandés, y de María Branwell. Tenía cinco hermanos: EmilyAnne, María, Elizabeth y Branwell. Algunas de sus experiencias le sirvieron de inspiración para escribir Jane Eyre (1847), Villette (1853) y Shirley (1849). Además, en su bibliografía se encuentra su trabajo en el ámbito de la poesía, compartido con sus hermanas Anne (La inquilina de Wildfell Hall) y Emily (Cumbres Borrascosas).

Gracias por leer...

1 comentario:

  1. Mi novela clásica favorita junto a "Historia de dos ciudades" y "Orgullo y prejuicio". En cuanto a adaptaciones, me quedo con la de la BBC de 2006 con Toby Stephens y Ruth Wilson.

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